Ernesto Kaplan: Sólo en nuestra ciudad murieron el año pasado 47 bebés más que en 2006. Estos son datos consolidados que maneja la Secretaría de Salud de la Municipalidad de Córdoba, en total murieron en ese periodo 295 niños menores de un año, cuyas madres tienen residencia en esta capital. De todos los chicos que murieron, 8 de cada 10 nacieron con menos de 2500 gramos, es decir, con bajo peso; y 6 de cada 10 fueron prematuros por factores de riesgo vinculados en general a deficiencias por controles de embarazo. Además, otro dato para agregar es que los bebés, cuyas madres tienen un bajo nivel de instrucción y son menores de 20 años, siguen siendo los más vulnerables según muestra el análisis de las cifras elaborado por el municipio. Para hablar sobre estos temas puntuales y sus derivaciones políticas, estamos en contacto telefónico con Medardo Ávila Vázquez, subsecretario de Salud de la Municipalidad de Córdoba. Medardo, buenas noches.
Medardo Ávila Vázquez: Buenas noches, gracias por llamar.
- Medardo, queríamos empezar por consultarte cuáles son los motivos, que vos atribuís, por los cuales se vienen registrando estas cifras verdaderamente preocupantes en nuestra ciudad.
MAV: Bueno, las cifras sí son preocupantes, sin dudas, más teniendo en cuenta que más allá de los números, esto significa situaciones particulares, de niños que han muerto, con una familia que ha quedado un tanto vacía, sin una respuesta y con un dolor muy grande; sobre todo el problema humano que hay detrás de cada uno de estos números. Y, por otro lado, está el tema de la mortalidad infantil como un símbolo, un reflejo del nivel socio económico, socio sanitario de una sociedad, o el nivel del bienestar de una sociedad; que en este caso, es la ciudad de Córdoba, ¿no? Entonces, son las dos características que tenemos que observar cuando analizamos mortalidad infantil. Lo que pasó el año pasado, en el 2007, que aumentó la mortalidad en la ciudad de Córdoba, cuando veníamos 30 años descendiendo año a año lentamente, algunos años descendía en forma más consistente y en otros años más por inercia, este año tuvimos un repunte. Nosotros creemos que tiene mucho que ver con que el año pasado tuvimos una epidemia de infecciones respiratorias sumamente crudas, sumamente agresivas; y eso afectó más, sobre todo al grupito de chicos que habían nacido con bajo peso al nacer.
- ¿Te referías concretamente a la bronqueolitis?
MAV: Claro, a la epidemia de bronqueolitis, de tos convulsa, que tuvimos el año pasado, tuvo una alta mortalidad, mucho más alta de la que tenemos este año y que la que tuvimos este año; y la que teníamos en general los años anteriores. Y afectó, en general, a la población más vulnerable que es la más pobre, y de la más pobre a la del grupo de los niñitos que nacieron con bajo peso, por lo tanto con su inmunidad y sus defensas disminuidas. Entonces, la bronqueolitis del año pasado nos pegó fuerte, nos aumentó la mortalidad y nos está mostrando, porque esto no nos sirve como excusa, yo te puedo decir: “si pero la bronqueolitis este año no pasa, no va a pasar de nuevo”.
Yo creo que, en realidad, lo que esto nos mostró es que nosotros tenemos un sistema sanitario muy precario, muy del día a día y que cuando tenemos situaciones como las del año pasado, nos mata a 47 chicos más, eso es lo grave.
- Merardo, Guillermo Heredia te saluda, quería más que consultarte, invitarte a la reflexión que habitualmente lo que decimos es que lo que puede solucionar la historia de nuestros país es la educación, ¿si? Y veíamos en un informe que nosotros tenemos, entre las mamás sin instrucción o con primario incompleto, que la tasa de mortalidad infantil trepa a 15 puntos sobre el promedio, o sea que llega al 28,2 por mil. Mientras que las madres con nivel de instrucción alto, secundario completo o más, terciario, universitario, permanecen muy por debajo del promedio, con sólo un 8,6 por mil. Digo, esto es mucho más extendido en el tiempo y no tiene que ver con la estacionalidad de un año sino con una cuestión de educación que habitualmente reclamamos, ¿no es cierto?
MAV: Sin duda, aquí hay una realidad, en la ciudad de Córdoba tenemos una parte muy amplia de la población que es muy vulnerable a las agresiones no solamente económicas y sociales, sino a estas naturales de las enfermedades, ¿no? Y eso se ve cuando pasa lo del año pasado que nos desata un pico en la mortalidad infantil, sin duda que el grupo de madres con más baja instrucción, esos datos que vos das son datos que nosotros hemos ido a buscar para tratar de entender dónde está el problema, que no es solamente sanitario: es un problema económico, es un problema social, y no tiene que ver la cuestión educacional y cultural. El grupo de madres que tiene altos niveles de instrucción, prácticamente tiene los niveles de mortalidad de los países desarrollados, y el grupo de madres que tiene baja instrucción tiene el nivel de mortalidad que tiene Centroamérica, digamos, ¿no? Y eso está pasando acá, en la ciudad de Córdoba, entonces eso nos tiene que mostrar que en Córdoba tenemos estas realidades, y que uno de los desafíos que tenemos que enfrentar en salud, como en todas las órbitas, es ver cómo hacemos que esta ciudad sea más igualitaria, más equitativa; más que seamos todos un poco más iguales.
-Claro, Merardo, justamente yo, te habla Martín Iparraguirre, te quería preguntar cómo pensás que se puede revertir el problema, teniendo en cuenta que estos datos también hablan de una disparidad absoluta en el acceso a la salud por parte de la población.
MAV: Sin duda, ahí la política que nosotros nos estamos planteando, continuación de la política de la gestión anterior, es de fortalecer la estructura estatal de Salud de la Municipalidad, orientada principalmente a lo que es atención primaria de la salud. A lo que está cerca de la gente o lo que la gente vive, y entendiendo los problemas de salud de cada grupo, de cada barrio en particular. No en función de una generalidad que sea determinada por una academia o una universidad, sino con los fundamentos académicos y científicos, pero también en la relación íntima y de ida y vuelta con la comunidad; que es el trabajo, el modelo de atención primaria. En la gestión anterior, terminamos construyendo una red de 95 centros de salud que están dispersos por toda la ciudad. Hay un tercer anillo de la ciudad de Córdoba, el que está alrededor de la circunvalación, y por adentro y por afuera de la circunvalación, pero ahí en las inmediaciones de la circunvalación de la ciudad; ese tercer anillo es el que concentra la mayor cantidad de población que tiene que recurrir a planes sociales para sobrevivir. O sea que en Córdoba, tenemos 400.000 planes sociales todavía activos, eso significa que hay una población de casi 600.000 personas que recurren a la Municipalidad en forma exclusiva por el servicio de salud, y nosotros creemos que todavía nos falta llegar más a ellos porque tenemos el 50 por ciento de las embarazadas no se están controlando; a pesar de que nosotros tenemos una red amplia de 95 centros en casi todos los barrios de la ciudad. En estas áreas, a menos de 20 cuadras vos tenés un centro de salud, pero no es solamente tener un centro de salud sino el de tener un trabajo comunitario, ¿no?, de tener un mecanismo de poder salir del centro de salud, caminar un poco en la calle, hablar con los vecinos, que los vecinos se constituyan en promotores de salud, que te digan a dónde está la adolescente que quedó embarazada y que está avergonzada; y que no se quiere hacer controlar el embarazo. Y que va a llegar a parir en forma prematura, y sin control, y sin duda vamos a tener un parto de riesgo y un niño con mayor riesgo de morir, ¿no? Entonces, esa es la estrategia que nos estamos planteando.
- Merardo, más allá de las fotos de ocasión con la administración de Schiaretti, ¿existen políticas conjuntas con el gobierno provincial para enfrentar esto?
MAV: Con el gobierno provincial lo que hemos logrado en estos últimos meses es poder conversar acerca de políticas sanitarias, ¿no?, y ponernos de acuerdo en algunas cosas. Como ser hemos hecho un trabajo en conjunto para fortalecer el Hospital de Urgencias, que es importante, cuando antes por los problemas de relaciones políticas partidarias, prácticamente no se establecía ningún tipo de coordinación. Yo creo que es importante que sostengamos, más allá de las diferencias políticas, que las tenemos con el gobierno provincial; pero que busquemos coincidencias en cuanto a políticas sanitarias para lograr hacer que los recursos que tiene el estado provincial o municipal sean más eficientes, sean mejor utilizados por la población. El tema es que en la atención primaria no estamos teniendo todavía una buena coordinación.
- Una última pregunta te quería hacer, Merardo, era que justo un dato quizás significativo de lo que ocurrió el año pasado era que la ciudad de Córdoba no adhirió al Plan Nacer, y la Provincia desarticuló el programa de Salud Familiar, destinado a fortalecer la prevención y la promoción de la salud materno – infantil. ¿Cuáles fueron las razones? ¿Esto puede haber afectado un poco, seguramente que sí, el crecimiento de la mortalidad infantil?
MAV: No, mirá, el Plan Nacer es un plan del Banco Mundial para financiar centros de atención primaria. Ese plan, que es dinero que a nosotros nos vendría muy bien, cuando nosotros necesitamos muchos más dinero del que tenemos actualmente disponible, pero es un dinero que tiene una serie de exigencias y condicionamientos, ¿viste? Entonces, nosotros estamos discutiendo con el gobierno nacional, que nos ofrece acceder al Plan Nacer, los condicionamientos. El Plan Nacer empezó, o sea se ofreció para Córdoba y las provincias del centro del país el año pasado, recién a la segunda mitad del año; y recién se empezó a implementar a fines de año, o sea que no hubiera tenido una incidencia sobre estos números concretos el año pasado. De todas maneras, nosotros actualmente si vos nos preguntas qué vamos a hacer, en las condiciones en las que está planteado el Plan Nacer, nosotros no vamos a adherir. El Plan Nacer está planteando que nosotros tenemos que reorganizar nuestro centro de salud y ponernos a funcionar como si fueran centros médicos privados que trabajan facturando por una cápita; o sea, introducimos toda una lógica de mercado en el funcionamiento de los centros de salud que nosotros queremos que tenga una lógica sanitaria de trabajo comunitario, y no de que ver cuánto facturo o cuánto cobro, que en realidad es el diseño que está bajando el Banco Mundial para este plan con el objetivo de que el sistema inclusive pueda ser privatizado después, pueda ser gerenciado por una empresa multinacional o nacional, independientemente del Estado. Y que se convierta de última en un negocio, que es más dentro del capitalismo, y en esta área estos proyectos y estos modelos ya fracasaron en todo el mundo, vos tenés en América que uno de los países que menor tasa de mortalidad infantil tiene es Cuba, con el 7, 8 por mil; y eso demuestra que organizando la salud, poniéndole un sentido social al trabajo solucionas el problema, sino necesitas mucho pero muchísimo dinero porque sería un negocio y en los negocios siempre hay alguien que se lleva una ganancia y acá no tenemos que hacer negocios.
- Sí, evidentemente todo el dinero que te pongan a tu disposición para empezar a laburar después tiene su rédito por otro lado, no todo lo que brilla es oro, digamos. Merardo, te agradecemos muchísimo tu comunicación con Radio Nacional (…).
MAV: Hasta luego, gracias.
Medardo Ávila Vázquez: Buenas noches, gracias por llamar.
- Medardo, queríamos empezar por consultarte cuáles son los motivos, que vos atribuís, por los cuales se vienen registrando estas cifras verdaderamente preocupantes en nuestra ciudad.
MAV: Bueno, las cifras sí son preocupantes, sin dudas, más teniendo en cuenta que más allá de los números, esto significa situaciones particulares, de niños que han muerto, con una familia que ha quedado un tanto vacía, sin una respuesta y con un dolor muy grande; sobre todo el problema humano que hay detrás de cada uno de estos números. Y, por otro lado, está el tema de la mortalidad infantil como un símbolo, un reflejo del nivel socio económico, socio sanitario de una sociedad, o el nivel del bienestar de una sociedad; que en este caso, es la ciudad de Córdoba, ¿no? Entonces, son las dos características que tenemos que observar cuando analizamos mortalidad infantil. Lo que pasó el año pasado, en el 2007, que aumentó la mortalidad en la ciudad de Córdoba, cuando veníamos 30 años descendiendo año a año lentamente, algunos años descendía en forma más consistente y en otros años más por inercia, este año tuvimos un repunte. Nosotros creemos que tiene mucho que ver con que el año pasado tuvimos una epidemia de infecciones respiratorias sumamente crudas, sumamente agresivas; y eso afectó más, sobre todo al grupito de chicos que habían nacido con bajo peso al nacer.
- ¿Te referías concretamente a la bronqueolitis?
MAV: Claro, a la epidemia de bronqueolitis, de tos convulsa, que tuvimos el año pasado, tuvo una alta mortalidad, mucho más alta de la que tenemos este año y que la que tuvimos este año; y la que teníamos en general los años anteriores. Y afectó, en general, a la población más vulnerable que es la más pobre, y de la más pobre a la del grupo de los niñitos que nacieron con bajo peso, por lo tanto con su inmunidad y sus defensas disminuidas. Entonces, la bronqueolitis del año pasado nos pegó fuerte, nos aumentó la mortalidad y nos está mostrando, porque esto no nos sirve como excusa, yo te puedo decir: “si pero la bronqueolitis este año no pasa, no va a pasar de nuevo”.
Yo creo que, en realidad, lo que esto nos mostró es que nosotros tenemos un sistema sanitario muy precario, muy del día a día y que cuando tenemos situaciones como las del año pasado, nos mata a 47 chicos más, eso es lo grave.
- Merardo, Guillermo Heredia te saluda, quería más que consultarte, invitarte a la reflexión que habitualmente lo que decimos es que lo que puede solucionar la historia de nuestros país es la educación, ¿si? Y veíamos en un informe que nosotros tenemos, entre las mamás sin instrucción o con primario incompleto, que la tasa de mortalidad infantil trepa a 15 puntos sobre el promedio, o sea que llega al 28,2 por mil. Mientras que las madres con nivel de instrucción alto, secundario completo o más, terciario, universitario, permanecen muy por debajo del promedio, con sólo un 8,6 por mil. Digo, esto es mucho más extendido en el tiempo y no tiene que ver con la estacionalidad de un año sino con una cuestión de educación que habitualmente reclamamos, ¿no es cierto?
MAV: Sin duda, aquí hay una realidad, en la ciudad de Córdoba tenemos una parte muy amplia de la población que es muy vulnerable a las agresiones no solamente económicas y sociales, sino a estas naturales de las enfermedades, ¿no? Y eso se ve cuando pasa lo del año pasado que nos desata un pico en la mortalidad infantil, sin duda que el grupo de madres con más baja instrucción, esos datos que vos das son datos que nosotros hemos ido a buscar para tratar de entender dónde está el problema, que no es solamente sanitario: es un problema económico, es un problema social, y no tiene que ver la cuestión educacional y cultural. El grupo de madres que tiene altos niveles de instrucción, prácticamente tiene los niveles de mortalidad de los países desarrollados, y el grupo de madres que tiene baja instrucción tiene el nivel de mortalidad que tiene Centroamérica, digamos, ¿no? Y eso está pasando acá, en la ciudad de Córdoba, entonces eso nos tiene que mostrar que en Córdoba tenemos estas realidades, y que uno de los desafíos que tenemos que enfrentar en salud, como en todas las órbitas, es ver cómo hacemos que esta ciudad sea más igualitaria, más equitativa; más que seamos todos un poco más iguales.
-Claro, Merardo, justamente yo, te habla Martín Iparraguirre, te quería preguntar cómo pensás que se puede revertir el problema, teniendo en cuenta que estos datos también hablan de una disparidad absoluta en el acceso a la salud por parte de la población.
MAV: Sin duda, ahí la política que nosotros nos estamos planteando, continuación de la política de la gestión anterior, es de fortalecer la estructura estatal de Salud de la Municipalidad, orientada principalmente a lo que es atención primaria de la salud. A lo que está cerca de la gente o lo que la gente vive, y entendiendo los problemas de salud de cada grupo, de cada barrio en particular. No en función de una generalidad que sea determinada por una academia o una universidad, sino con los fundamentos académicos y científicos, pero también en la relación íntima y de ida y vuelta con la comunidad; que es el trabajo, el modelo de atención primaria. En la gestión anterior, terminamos construyendo una red de 95 centros de salud que están dispersos por toda la ciudad. Hay un tercer anillo de la ciudad de Córdoba, el que está alrededor de la circunvalación, y por adentro y por afuera de la circunvalación, pero ahí en las inmediaciones de la circunvalación de la ciudad; ese tercer anillo es el que concentra la mayor cantidad de población que tiene que recurrir a planes sociales para sobrevivir. O sea que en Córdoba, tenemos 400.000 planes sociales todavía activos, eso significa que hay una población de casi 600.000 personas que recurren a la Municipalidad en forma exclusiva por el servicio de salud, y nosotros creemos que todavía nos falta llegar más a ellos porque tenemos el 50 por ciento de las embarazadas no se están controlando; a pesar de que nosotros tenemos una red amplia de 95 centros en casi todos los barrios de la ciudad. En estas áreas, a menos de 20 cuadras vos tenés un centro de salud, pero no es solamente tener un centro de salud sino el de tener un trabajo comunitario, ¿no?, de tener un mecanismo de poder salir del centro de salud, caminar un poco en la calle, hablar con los vecinos, que los vecinos se constituyan en promotores de salud, que te digan a dónde está la adolescente que quedó embarazada y que está avergonzada; y que no se quiere hacer controlar el embarazo. Y que va a llegar a parir en forma prematura, y sin control, y sin duda vamos a tener un parto de riesgo y un niño con mayor riesgo de morir, ¿no? Entonces, esa es la estrategia que nos estamos planteando.
- Merardo, más allá de las fotos de ocasión con la administración de Schiaretti, ¿existen políticas conjuntas con el gobierno provincial para enfrentar esto?
MAV: Con el gobierno provincial lo que hemos logrado en estos últimos meses es poder conversar acerca de políticas sanitarias, ¿no?, y ponernos de acuerdo en algunas cosas. Como ser hemos hecho un trabajo en conjunto para fortalecer el Hospital de Urgencias, que es importante, cuando antes por los problemas de relaciones políticas partidarias, prácticamente no se establecía ningún tipo de coordinación. Yo creo que es importante que sostengamos, más allá de las diferencias políticas, que las tenemos con el gobierno provincial; pero que busquemos coincidencias en cuanto a políticas sanitarias para lograr hacer que los recursos que tiene el estado provincial o municipal sean más eficientes, sean mejor utilizados por la población. El tema es que en la atención primaria no estamos teniendo todavía una buena coordinación.
- Una última pregunta te quería hacer, Merardo, era que justo un dato quizás significativo de lo que ocurrió el año pasado era que la ciudad de Córdoba no adhirió al Plan Nacer, y la Provincia desarticuló el programa de Salud Familiar, destinado a fortalecer la prevención y la promoción de la salud materno – infantil. ¿Cuáles fueron las razones? ¿Esto puede haber afectado un poco, seguramente que sí, el crecimiento de la mortalidad infantil?
MAV: No, mirá, el Plan Nacer es un plan del Banco Mundial para financiar centros de atención primaria. Ese plan, que es dinero que a nosotros nos vendría muy bien, cuando nosotros necesitamos muchos más dinero del que tenemos actualmente disponible, pero es un dinero que tiene una serie de exigencias y condicionamientos, ¿viste? Entonces, nosotros estamos discutiendo con el gobierno nacional, que nos ofrece acceder al Plan Nacer, los condicionamientos. El Plan Nacer empezó, o sea se ofreció para Córdoba y las provincias del centro del país el año pasado, recién a la segunda mitad del año; y recién se empezó a implementar a fines de año, o sea que no hubiera tenido una incidencia sobre estos números concretos el año pasado. De todas maneras, nosotros actualmente si vos nos preguntas qué vamos a hacer, en las condiciones en las que está planteado el Plan Nacer, nosotros no vamos a adherir. El Plan Nacer está planteando que nosotros tenemos que reorganizar nuestro centro de salud y ponernos a funcionar como si fueran centros médicos privados que trabajan facturando por una cápita; o sea, introducimos toda una lógica de mercado en el funcionamiento de los centros de salud que nosotros queremos que tenga una lógica sanitaria de trabajo comunitario, y no de que ver cuánto facturo o cuánto cobro, que en realidad es el diseño que está bajando el Banco Mundial para este plan con el objetivo de que el sistema inclusive pueda ser privatizado después, pueda ser gerenciado por una empresa multinacional o nacional, independientemente del Estado. Y que se convierta de última en un negocio, que es más dentro del capitalismo, y en esta área estos proyectos y estos modelos ya fracasaron en todo el mundo, vos tenés en América que uno de los países que menor tasa de mortalidad infantil tiene es Cuba, con el 7, 8 por mil; y eso demuestra que organizando la salud, poniéndole un sentido social al trabajo solucionas el problema, sino necesitas mucho pero muchísimo dinero porque sería un negocio y en los negocios siempre hay alguien que se lleva una ganancia y acá no tenemos que hacer negocios.
- Sí, evidentemente todo el dinero que te pongan a tu disposición para empezar a laburar después tiene su rédito por otro lado, no todo lo que brilla es oro, digamos. Merardo, te agradecemos muchísimo tu comunicación con Radio Nacional (…).
MAV: Hasta luego, gracias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario